Scratch es un lenguaje de programación visual y muy divertido que nos permite crear juegos, animaciones, música y arte. Se trata de una excelente herramienta para introducir a los alumnos a otros lenguajes de programación más tradicionales. Desarrollando proyectos con Scratch aprendemos conceptos matemáticos y informáticos fundamentales, como por ejemplo los procesos interactivos, las coordenadas en un plano o las variables. Además, también permite a jóvenes y adultos pensar de forma creativa, razonar sistemáticamente y trabajar en colaboración.
En Scratch programamos mediante bloques de construcción. Es precisamente ahí donde se encuentra su originalidad. A diferencia de otros lenguajes de programación, a menudo bastante confusos, en Scratch encajamos piezas como en un puzzle o como en un juego de construcción tradicional. De esta forma creamos todo tipo de animaciones y juegos.